XLIV El destino es caprichoso

Hola a todos de nuevo. Ya no escribimos con tanta frecuencia porque, la verdad, no se nos ocurre qué contarles. Pero hoy ha sucedido algo que queremos compartir.

A los pocos meses de llegar a Melbourne, descubrimos la existencia de la Royal Historical Society of Victoria. Para nosotros fue una grata sorpresa porque al menos en Gran Canaria no hay nada que se le parezca. Lo mejor de todo es que aceptan voluntarios para colaborar en todas las actividades que realizan, así que no dudamos en hacer la incripción. Nuestra buena amiga Sara tradujo los currículums, los enviamos y a los pocos días recibimos respuesta.

El correo venía a decir que con nuestra formación tendrían hasta que pagarnos, pero que nos tendrían en cuenta para próximas convocatorias. La segunda vino en julio, de nuevo una negativa por tener preferencia las personas jubilidas que habían solicitado colaborar.

Pues hoy, día 18 de febrero, han vuelto a contactar con nosotros. Nos ofrecen entrar a formar parte del equipo de voluntariado como Coordinador/a de Colección y Guía en las visitas programadas. Simplemente, nos estamos cag**** en todo.

¿Qué nos enseña esto? Confirma la sensación que siempre tuvimos sobre Australia. Allí hay oportunidades. Siendo paciente todo llega. Desde aquí vemos (muy contentos) cómo nuestros amigos salen adelante. Allí teníamos trabajo y la esperanza de que siempre llegaría algo mejor. Estás lejos de la familia, echas de menos tu tierra y el sentimiento de tristeza nos invadió muchísimas veces. Pero aquí, aún estando rodeados de nuestra gente, esa tristeza viene por otro lado. La falta de oportunidades y de trabajo gana siempre la batalla. Sí, yo he tenido trabajos esporádicos de promotora y la semana que viene comienzo en mi antigua empresa de azafatas (no queda más remedio aunque sea en condiciones precarias), sin embargo eso ni da de comer ni me hace crecer. Después del gran salto a Melbourne, siento que esto es dar pasos atrás, volver a aquello de lo que huímos y empezar como si nada hubiera pasado. Por otra parte, me puedo considerar afortunada, Aitor sigue sin conseguir trabajo por mucho que aplique decenas de veces al día y haya repartido muchos currículums. 

El haber entrado de nuevo en la universidad a estudiar Turismo me despeja a veces de esa sensación (además he aprobado los exámenes a los que me presenté). Me pregunto por qué he de cambiar mi formación y profesión para salir del bucle de trabajos de m*****, si fuera de España valoran el sacrificio de haber terminado una carrera. El destino es caprichoso.

Con respecto a la razón que nos obligó a volver, Aitor ha hecho varias visitas médicas y pruebas buscando qué le pasa a sus riñones. El diagnóstico final es que tiene un tumor benigno, es muy pequeño, estamos a la espera de nuevas pruebas que confirmen su origen y así conocer cuál es el siguiente paso (tratamiento, operación...No sabemos). Él se encuentra bien, sigue sin notar nada. En ese sentido agradecemos estar aquí, pasar allá por ese tipo de pruebas hubiera sido bastante duro.

Y como última NO novedad, seguimos sin recibir el dinero de Bupa. En cuanto lo solucionemos les contaremos qué ha pasado y cuál ha sido el proceso (por si en algún momento se ven en esa situación).

Sin más les agradezco una vez más que nos lean, estamos muy contentos por todos aquellos que están empezando el proceso o son recién llegados al país. Les animamos a luchar por todo aquello que deseen, porque cuando vuelvan la vista atrás, habrá merecido la pena.

P.D.: Nuestra página de Facebook está activa, compartimos artículos relacionados con la inmigración y curiosidades de Australia en general. También pueden enviarnos privados para preguntarnos lo que quieran :)