viernes, 8 de febrero de 2013

IX Alea iacta est

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Menuda semanita nos ha dado la “burrocracia”. El martes recibimos la información definitiva sobre qué habría que mandar a la embajada para aplicar la visa de estudiante. Reunidos todos los papeles de los que llevo hablando todo este tiempo, sólo me faltaban dos cositas. Rellenar una solicitud de visado de 24 folios en inglés y hacer copias compulsadas de nuestros pasaportes. Ahora piensen durante unos segundos cuál de las dos tareas fue más complicada…
Error, no fue rellenar el visado, eso me llevó sólo dos horas y una conversación de Skype con Juan. Lo más complicado fue obtener una copia compulsada de los pasaportes, nada más y nada menos que 4 visitas en 3 días a la “Supercomisaría” de Las Palmas.

Visita 1: tras haber llamado a la comisaría mas cercana a las 3 de a tarde, y responderme que no sabían nada y que fuese por la mañana, consulté en internet el horario de la Supercomisaría y vi que por las tardes también hacen trámites. Me acerqué, pero no, tenía que ir por la mañana. Me preguntó el policía para qué era todo y me guió en lo que tenía que hacer (pero un poco mal como verán ahora).
Visita 2: Me atienden, no valen las copias en color y necesito un papel firmado por Aitor para solicitar su compulsa a parte de la autorización que él me había hecho (estaba trabajando). Respiro hondo, pateo hasta el Cabildo a por Aitor, luego a la facultad a por las fotocopias de las 32 páginas de cada pasaporte y luego otra vez a la comisaría.
Visita 3: Según la funcionaria, una hora antes me había dicho que las compulsas no las dan el mismo día. Me dice que vaya mañana (es decir, hoy) a la 1 porque la chica que compulsa no lo tendría antes, y que además se tarda realmente dos días y me está haciendo un favor. 
Ahí ya no pude más, salí de la comisaría y sólo pude llorar para descargar el cansancio de todo este tiempo, por lo difícil que ponen las cosas y el cómo complican hasta lo más simple. Además, puede que me esté acostumbrando a que me traten como un trapo, porque últimamente no hago más que encontrarme con gente maleducada, a los que espero, que algún día los traten sólo la mitad de mal que a mi, a ver si les parece bien lo que hacen.
Visita 4: llego hoy a las 12.30. Pido los pasaportes, pero sólo traen el mío, les pido el de Aitor… ¡Y me dicen que tiene que venir él! Me subió tal “no se qué” por todo el cuerpo, que la cara que puse debió asustarla. Le dije que si tenía permiso para pedirlo lo tendría también para retirarlo y que no me iba a marchar sin ese pasaporte porque nunca se me había informado de eso. Total, que se metió en un despacho a los 2 minutos salió con el pasaporte de Aitor y su copia.
Lo único bueno que me pasó, después de todo esto, es que al salir me encontré con el policía que me atendió el primer día, me vio ayer entrar y al parecer me vio llorando en la puerta al salir. Me paró para preguntarme si estaba bien, porque se quedó preocupado al verme llorar el día anterior. Dice que está acostumbrado a ver a gente  a la que tratan mal como a mi, que los funcionarios son unos indecentes y no realizan sus tareas como deberían. Para mi sorpresa, comenzó a hablarme de lo mal que va el país por gente ineficaz como esa y me confesó que me hicieron esperar por el pasaporte porque les dio la gana, no hay tal volumen de peticiones como para tardar dos días en sellar fotocopias. Me dijo además, que si se lo hubiese pedido me hubiera llevado los pasaportes ayer mismo. El pobrecillo, me deseó mucha suerte y me dijo: “me alegra que tu y tu novio se vayan del país, porque cuando se vaya al fondo del mar no estarán aquí para verlo”. Aluciné con que un policía me dijera eso.
Después del periplo, fui a Correos. En un sobre de nada menos que 473gr se fueron meses de papeles, traducciones, nervios y mucho dinero invertido. Ahora sólo queda esperar el ansiado mail que anuncie: “visa granted”. Nosotros ya hemos hecho todo lo que está en nuestra mano.

Les dejo este vídeo, ya conocido, pero que de vez en cuando me gusta ver, para que se animen a luchar por aquello que quieren ¿Te atreves a soñar?


Crucen los dedos por nosotros, que esto no ha hecho más que comenzar. Allá vamos.
La suerte está echada. Alea iacta est.

2 comentarios:

  1. En cualquier notaría te compulsan los pasaportes por un módico precio y no es necesario fotocopiar todas las páginas del mismo, con la hoja en la que aparecen vuestros datos es suficiente. Siento no haber empezado a leer tu blog antes, te habría ayudado con esto. Yo he estado en Melbourne estudiando de julio a diciembre de 2012 y la verdad que no he tenido ningún problema a la hora de conseguir mi visado. Mucha suerte!!

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  2. Hola! Gracias por la ayuda, nosotros hicimos eso porque fue lo que nos dijeron en la embajada, como me explicaron en la Policía tiene sentido que pidan todos los folios para comprobar dónde has estado. En nuestro caso, al pedir el visado de pareja y no sólo como estudiante, se nos han complicado las cosas, pero poco a poco lo vamos encauzando todo y corrigiendo errores. Pues mira, ya que viviste allí nos vendría genial que nos recomendaras zonas donde vivir baratitas, que ya andamos mirando habitaciones y estudios ;)

    Muchas gracias por tu comentario, espero que nos sigas leyendo!! Saludos :)

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